‘Sabor a Málaga’ abre canales de financiación para sus empresas adheridas mediante un convenio con Cajamar
Es el primero de los acuerdos de colaboración que ‘Sabor a Málaga’ cierra con entidades financieras para promover el fortalecimiento de las empresas
Servirán para proporcionar a las empresas de la provincia de Málaga vías de financiación adecuados a sus fines y a un tipo de interés bajo que favorezcan iniciativas como la modernización de las instalaciones de las empresas, entre otras
Estos acuerdos complementan la convocatoria de ayudas a las pymes agroalimentarias y ganaderas por valor de 350.000 euros aprobada en mayo
‘Sabor a Málaga’, la marca creada por la Diputación de Málaga para la promoción de la imagen de los productos autóctonos malagueños, ha dado el primer paso hacia la apertura de canales de financiación para sus empresas adheridas mediante la firma de un convenio con Cajamar Caja Rural. Se trata del primero de los acuerdos de colaboración que ‘Sabor a Málaga’ tiene previsto cerrar con entidades financieras para promover el fortalecimiento de las empresas. Estos acuerdos servirán para complementar la convocatoria de ayudas a las pymes agroalimentarias y ganaderas por valor de 350.000 euros aprobada el pasado mes de mayo.
Así lo ha dado a conocer el vicepresidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, acompañado por Manuel Carlos Sánchez San Román, director territorial de Cajamar en Andalucía Occidental, y por Javier Martín Taillefer, gerente de Banca de Empresas de la Dirección Territorial, durante la firma del convenio.
Salado ha recordado que ‘Sabor a Málaga’ ya tiene acuerdos de colaboración con grandes superficies y distribuidores (Makro, Eroski, Maskom, El Corte Inglés, Carrefour, Mercafrutas, Grupo Hermanos Gallego Fernández y Román y Martos) para mejorar los canales de distribución de los productos ‘Sabor a Málaga’. Se trata ahora de proporcionar a las empresas adheridas a la marca (más de 350, además de los 300 chiringuitos del litoral), canales de financiación adecuados a sus fines y a un tipo de interés bajo que favorezcan iniciativas como la modernización de las instalaciones físicas o virtuales de las empresas, entre otras; proyectos que generen una mayor productividad y que contribuyan a la creación de empleo.
El acuerdo con Cajamar Caja Rural contempla, asimismo, varias líneas de crédito especiales para empresas y autónomos del sector según sea su actividad (sector hotelero, mercado de abastos, bodegas, olivar, subtropicales, jamón y chacinería, entre otros), además de otras líneas para el empleo joven, el desarrollo de la mujer rural, la adquisición de vehículos comerciales o para favorecer la presencia de las empresas en eventos internacionales, entre otras.
Convocatoria para incentivar la modernización de las pymes
Este primer acuerdo llega menos de un mes después de aprobarse la convocatoria de ayudas para incentivar la modernización de las pymes agroalimentarias y ganaderas. La Diputación destinará 350.000 euros al sector, que cuenta en la provincia con más de 750 empresas que emplean a unos 9.000 trabajadores. Las subvenciones, que se destinarán a financiar la inversión en maquinaria, herramientas, equipos y sistemas de gestión o equipos auxiliares, oscilarán entre un 35 y un 50% del presupuesto total del proyecto, con una cuantía máxima de 35.000 euros por empresa.
Carlos Sánchez ha manifestado que con la firma de este acuerdo “Cajamar facilitará que las empresas adheridas a ‘Sabor a Málaga’ obtengan el resto de la financiación para su proyecto con unas condiciones favorables, contando, además, con un asesoramiento personal ofrecido por especialistas de su departamento de banca de empresas de modo que puedan ampliar su actividad y crecer tanto en el mercado interior como exterior”.
Por su parte, Salado ha incidido en la apuesta de la Diputación por mejorar la competitividad de las empresas del sector agroalimentario, que en los últimos años ha experimentado un importante crecimiento en la provincia. Este año, el ente supramunicipal ha dedicado 2,8 millones de euros en su presupuesto al impulso del sector, y la convocatoria de ayudas recientemente aprobada triplica el importe de la última, aprobada finales de 2014.
“Las empresas del sector agroalimentario tienen un enorme peso en el desarrollo de nuestra economía local”, ha señalado Salado, que ha manifestado que uno de los grandes retos de la Diputación es el de “fortalecer y consolidar el tejido empresarial mediante proyectos que generen empleo y una mayor productividad” para, así, “conseguir un sector agroalimentario tan fuerte como el turístico”.